Nuevos límites de velocidad. Por nuestra seguridad.

Desde comienzos de este año 2019, la DGT ha dado una vuelta de tuerca más en su intento de reducir la siniestralidad al volante por exceso de velocidad. Para ello ha modificado los límites de velocidad para los diferentes tipos de vehículos y según el tipo de vía por la que circulen.

Esto ha creado mucha controversia entre los conductores, que acusan a la DGT de que detrás de estas medidas existe un afán recaudatorio.

Siendo ésta la principal protesta, los conductores suelen ser bastante reacios a las reducciones de los límites de velocidad, y para ello acuden a argumentos de muy dudosa validez como:

• “Los coches son mucho más seguros que antes y por tanto lo que hay que hacer es aumentar los límites.” No están teniendo en cuenta que es verdad que los coches son más seguros, pero las lesiones provocadas por la energía cinética sí vienen influidas directamente por la velocidad.
• “Conducir en línea recta no conlleva peligro y por tanto no tiene sentido limitar más la velocidad.” Casi el 40% de los accidentes se producen en rectas y sin la intervención de otro vehículo.
• “No tiene sentido rebajar en 10 km/h el límite, ya que es lo mismo tener un accidente a 90 Km/h que a 100 Km/h.” Está demostrado que la probabilidad de fallecer a 92 Km/h es un 40% superior que circulando a 80 Km/h.

Aunque podríamos seguir desmintiendo argumentos en contra de limitar la velocidad, vayamos a lo importante. Recordemos los nuevos límites de velocidad en el siguiente cuadro:

Imagen de www.autopista.es